Carrie y su trastorno bipolar



¿Quién es Carrie? Quizás algunos de vosotros no lo sabéis y aún no la conocéis.

Carrie es la protagonista de Homeland, una serie estadunidense que ha puesto de moda el Trastorno Bipolar, la Clomipramina y la Terapia Electroconvulsiva.  

Antes de adentrarnos en el mundo de la protagonista, es interesante conocer que es el trastorno bipolar. Esta disfunción, es a grosso modo, un problema relacionado con el estado de ánimo y cambios en la actividad enérgica. La persona que padece un trastorno bipolar tiende a tener un estado de ánimo elevado, expansivo o irritable durante como mínimo  una semana (si padece un episodio maníaco) o al menos 4 días (si padece un episodio hipomaniaco).

Los episodios maniacos son los que contemplan la posibilidad de síntomas psicóticos añadidos. Por el contrario, los episodios hipomaníacos nunca tienen síntomas psicóticos. También existe la posibilidad de un episodio mixto, cumpliendo los criterios tanto para un episodio maníaco como para un episodio depresivo mayor casi cada día. En la serie, se hace difícil identificar qué tipo de episodios ha vivido Carrie, aunque la medicación antipsicótica nos sugiere la posibilidad de que alguna vez sus síntomas fueran maníacos, aunque en ningún caso la serie ha dejado entre ver un estado psicótico en la protagonista.

Lo importante es entender que síntomas son los que podemos encontrar en una persona que está maniaca. La persona suele presentar una expansión anímica y cognitiva. Para que os hagáis una idea, podéis ver estas características en esta escena que os he dejado más arriba, en el hospital, cuando Carrie ha sufrido un ataque de una bomba y el estrés ha puesto de manifiesto la aparición de la problemática. En la manía aparecen síntomas opuestos a la depresión, aunque también aparecen síntomas parecidos como puede ser problemas de sueño (la protagonista si nos fijamos duerme poco) y  trastornos del apetito o de la ingesta.

En general, considero que los guionistas de la serie se han informado bastante bien antes de elaborar el personaje de Carrie. Vemos a una Carrie que irradia energía aparentemente inagotable y desbordante para los demás. Carrie es como un torbellino. Más concretamente en la escena propuesta, podemos ver que habla sin parar (verborrea) propio de este estado y tenemos la sensación de que los pensamientos se agolpan sin tiempo para expresarlos (fuga de ideas). La protagonista está acelerada: habla rápido, entrecortada, le es difícil mantener la atención.

Los trastornos Bipolares suelen darse entre los 20-25 años. Carrie cuenta en uno de los capítulos, que en ella apareció más o menos en la época universitaria y podemos suponer que fue dentro de este rango de edad.  En este sentido, los guionistas han cuidado mucho el perfil que inferirían en la protagonista.  Otro tema interesante a comentar es el padre de la protagonista, que también tiene un trastorno bipolar. Las investigaciones indican que puede existir relación biológica entre este tipo de trastornos, aunque el porcentaje no es suficiente como para que haya una evidencia inequívoca.

Carrie se somete a una terapia electroconvulsiva en la serie. Actualmente, este tipo de recurso puede ser útil en pacientes en un estado muy deteriorado, pero no como primera opción. En este sentido, los guionistas de la serie, han querido dar un toque de emoción a la serie, ya que lo más adecuado sería haber empleado un tratamiento bien establecido como la psicoeducación como programa para aumentar la adherencia a la medicación (en este caso al litio que la protagonista ya toma), la terapia marital y familiar, la terapia cognitivo-conductual o la farmacoterapia (litio).

Una de las cosas que me ha gustado de la serie, es el realismo con el que Carrie discute sobre los efectos del litio. El litio tiene muchos efectos secundarios, y así lo retrata en la serie. Tanto es así, que la protagonista deja el litio para encaminarse a otra propuesta terapéutica “correr 10 km al día, comer bien y hacer horarios estables”. Parece que de alguna manera, los guionistas quieren referirse a la terapia interpersonal y de ritmo social que actualmente se encuentra en fase experimental. 

La terapia interpersonal y del ritmo social está desarrollada por Frank. Se centra en dos aspectos básicos: las relaciones interpersonales y establecer ciclos rítmicos o rutinas cotidianas.

Es interesante hablar como la paciente abusa del alcohol en determinados momentos de la serie. Un estudio de ECA, indica que el 60% de los pacientes bipolares I abusan de substancias; y el alcoholismo es el problema estrella.

Me gusta como la serie ha caracterizado el papel de Carrie. Considero que se refleja muy bien las preocupaciones que pueden tener este tipo de pacientes, aunque no creo que Carrie necesitara terapia electroconvulsiva. La forma de ser de Carrie también se ajusta muy bien a lo que los científicos han estudiado como las características de personalidad relacionadas. La paciente siempre está activa, descansa poco, aumente su actividad laboral e incluso sexual, hasta incluso tiene una aventura con alguien a quién está investigando. Carrie es polémica, como pueden llegar a ser algunos bipolares. Carrie es seductora.

¿Cómo el carácter bipolar de Carrie influirá en la cuarta temporada?


Yo ya tengo mis hipótesis, ¿y tú?

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