Normas de una buena psicoeducación

La psicoeducación es definida como el conocimiento dado a las personas que tienen algún tipo de desorden psicológico. Los miembros cercanos también pueden recibir esta formación.

Recibir e impartir una buena educación psicológica dependerá de distintos factores:

1.      Relevancia y brevedad: El terapeuta deberá resumir los aspectos más importantes de la enfermedad y no dar poca o demasiada información.

2.      Adaptación: El profesional deberá moldearse a las particularidades del sujeto o grupo.

3.    Transparencia: El psicólogo deberá presentar los contenidos sin manipulación alguna, hablando claramente acera distintos aspectos de la enfermedad.

4.     Lenguaje comprensible: Los términos emprados deberán ser entendidos por el paciente, sin necesidad de recorrer a un diccionario médico.

5.     Ilustración: Siempre que sea posible, se utilizará material visual para complementar las explicaciones.

6.     Instrucciones de tratamiento:  El terapeuta deberá dar instrucciones claras y concisas al paciente acera el funcionamiento del tratamiento.

7.       Practica: Se deberán emprar ejercicios prácticos para la total comprensión de la teoría. Estas actividades permitirán al paciente un mejor manejo de su vida diaria. Por ejemplo, en el trabajo con esquizofrénicos, el paciente deberá detectar cuales son los signos que permiten interpretar la posibilidad de un brote y también establecer unas pautas sobre qué hacer cuando esto ocurra.

8.       Motivación: se deberá trabajar con la motivación de paciente y identificar en la fase motivacional en que se encuentra.

9.       Resumen y feedback: El terapeuta retroalimentará y reforzará a sus pacientes durante el proceso psicoeducativo. Al terminar, siempre se dará un resumen de las cuestiones habladas y discutidas.